“Buenos días. Batalla sobrecumpliendo. Dígame”, así respondió Félix Machado Cordero, uno de los jefes de turno del central “Batalla de las Guásimas”, fundado por la Revolución Cubana en el año 1979.
Yo no me esperaba la sorpresa, porque faltaban unas toneladas y pensé que sería hoy jueves el pitazo final, pero el agroindustrial me aseguró, desde la sala de control, que ya el plan técnico económico era real (entrevista disponible en ficheros de audio).
Luego de los reportes en vivo para la emisoras (my shared files) y las llamadas de rigor, vino la caravana, el abrazo, el brindis y el júbilo popular. “Te vas pa Batalla con nosotros, yo te traigo luego”, enfatizaba un chofer, mientras sonaban la conga y los claxon.
Nos subimos en una camioneta y paseamos con los batallenses por el centro del pueblo. Arévalo, un custodio de la industria que iba en la camioneta, gritó un par de carajos por la Revolución.
Si bien para la televisión pedía que, por favor, guardaran las botellas ante el paso de la cámara, no me escondí para darme unos tragos de ron con la familia cañera (“Nada más peligroso que un consejo acompañado de un mal ejemplo”) y puse esta foto aquí que quizá no le guste a jefes de redacción, pretendientas y puritanos.
Pero bueno, si Fernando Alonso, Kaká y muchos otros se bañan con la champaña o la sidra cuando ganan una medalla ¿por qué yo, -hijo de azucareros y orgulloso de vivir en este gran Batey-, no puedo hacerlo?
Felicidades para los azucareros de Batalla
Ese dia estaba en camino a Cadena Agramonte pra hacer la prueba de locución, y mientras viajaba escuchaba la emisora gracias a la tecnología movil y que sorpressa cuando escucho la noticia, en la guagua todos se esteraron por mi entuciasmo, nada que así somos